Bogotá, 2 mar (EFE).- El ataque aéreo de Colombia al campamento en Ecuador en el que murió el portavoz internacional de las FARC, “Raúl Reyes”, sólo es comparable a las incursiones de Israel en Oriente Medio y de Estados Unidos en Irak, consideró hoy la Agencia de Noticias Nueva Colombia (ANNCOL), afín al grupo guerrillero.
El director de este órgano informativo con sede en Estocolmo, Roberto Gutiérrez, opinó que la acción militar contra el “número dos” de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) fue “una vulgar operación de ‘apunta y dispara'”.
Nada distinto “a los asesinatos selectivos que tan diestramente ejecutan los agentes del Mossad (servicio secreto israelí) en el Medio Oriente, o a los bombardeos indiscriminados que tantas víctimas han causado en Irak”, apuntó Gutiérrez, cuyo sitio divulga con frecuencia materiales de la guerrilla colombiana.
La verdad es que el “más grande golpe militar contra las FARC”, como lo presentó el Gobierno colombiano, “se reduce al pago de un soborno, y al rastreo de un dispositivo electrónico usando la tecnología que alegremente nos ha proporcionado el Plan Colombia y que, por cierto, manejan los técnicos gringos”, opinó.
La política de Seguridad Democrática del Gobierno del presidente de Colombia, Álvaro Uribe, dijo Gutiérrez, “sólo llega hasta donde los satélites gringos son capaces de ver, y hasta donde los sobornos con cantidades estratosféricas pagados a un traidor pueden convencer”.
“No hay combate, no hay riesgo, ni hay honor”, indicó Gutiérrez, para observar que en la base rebelde bombardeada “nadie tuvo siquiera la oportunidad de defender su vida”.
“Raúl Reyes”, alias de Luis Édgar Devia, murió el sábado por la madrugada junto a otros 16 rebeldes con los que acampaba en Santa Rosa, paraje ecuatoriano a menos de dos kilómetros de la frontera sur de Colombia con el país vecino.
