“Seguir fiel a uno mismo, buscar lo que te hace diferente y sentir la música, pinchar con pasión”, ese es el consejo de Manu Vulcano, ganador del Burn Studios Residency, para los que estáis empezando y quieren abrir camino.
“En Ibiza hay más DJs que camareros, por eso hay que destacar”, nos confiesa. Y así hizo el de Albacete en su primera aparición dentro del Burn Studios en Catwalk (Barcelona) hace unos meses. “El jurado me dijo que ya lo tenía claro y aquí estoy, en un sueño” dice moviendo sus rizos.
En la segunda edición del Burn Studios Residency, y con más de 7.000 aspirantes, Manu Vulcano ha sido el primer español en alzarse con esta tremenda distinción. Y qué mejor para empezar con buen pié en el mundo de la electrónica que teniendo una residencia en Sankeys Ibiza.
El local, con una clara referencia al alma de Sankeys Manchester y un espíritu muy underground inglés, está dividido en varias salas y en una gran terraza. Al poco de empezar Manu con su sesión, la sala principal ya movía el suelo al ritmo de la música. Torsos enrojecidos por el sol, trikinis, riñoneras, un pingüino y otros elementos conformaban un público dispar pero totalmente entregado al excelente warm-up de Manu. Con puntualidad inglesa, el ganador del Burn Studios Residency cedió la mesa al siguiente DJ mientras el público se calmaba. Sin duda, el primer contacto con la música de Manu había sido muy buena.
Al día siguiente, y después de reponer fuerzas en la playa de Ses Salines, Ocean Beach Club nos acogió para mantener una charla con Manu. Cercano, humilde y muy del día a día: “ahora pienso en disfrutar de Ibiza, de la gente que conozco aquí, de pinchar, de vivir la isla” nos confiesa. Aunque esperamos tener noticias suyas pronto para su próxima residencia de cara a invierno.
A caballo entre el deep-hous, deep-techno o micro-house, término acuñado por Luciano, ídolo de Manu. Así son sus sesiones, aunque no le guste encasillarse en un estilo concreto como demuestran sus tres referentes musicales: “Luciano, Marco Carola y Uner” nos confiesa.
Desde los 14 años cuando su padre le regaló sus primeros platos, a pinchar en Ibiza ha habido una trayectoria sencilla dejando su huella en locales de Albacete, Viñarock o Electromar. Aunque ya se hayan cumplido parte de sus aspiraciones, “pinchar en Ibiza es lo más” dice, le encantaría estar en Sónar y en Monegros, dos escenarios inmensos para un chico que ya ha ganado mucho terreno y que, esperemos, en menos de 3 años podamos ver por Barcelona.
Echa de menos el vinilo, su tacto, la calidad, pero nos confiesa que le gusta pinchar novedades, “me encanta cuando me llega un tema nuevo, es una sensación genial, pero ahora mismo no puedo gastar tanto dinero en vinilos… de momento” nos dice. Y esperemos que sea así, ya que Manu tiene mucha destreza y un gran oído musical innato, como bien le comentó Jamie Jones en el Boot Camp que hicieron durante el concurso: “me dijo que me veía con mucha carisma y que mi sesión estaba muy bien hecha”.
Tras visitar un casi desértico Privilege, nos fuimos a la cama para reponer fuerzas para la sorpresa al día siguiente. Un poco más de playa y ya teníamos las maletas hechas para volver a nuestros destinos. Con 3 horas de antelación nos plantamos en el aeropuerto de Ibiza con gran expectación. A finales de junio Cathy & David Guetta inauguraron el primer club del aeropuerto de la Isla. Y cuál fue nuestra sorpresa al encontrarnos a Manu Vulcano tras los platos. Con un evidente cambio de registro, algo más vocal y muy estilo Guetta, Manu nos dio el último baile del viaje.
Ya en casa y tras escuchar un CD con la sesión de Manu, podemos decir que la electrónica española tiene muy buenos artistas que, gracias a programas como el de Burn Studios Residency, empezarán a abrirse camino en un mundo que, seguro, se lo van a comer.
