Google está preparando un proyecto por el que propone el traslado a barcos en mar abierto de sus supercomputadores y centros de datos.
El proyecto denominado ‘Computer navy’ se basa en el uso de ‘water-data centres’, aplicación patentada por Google, por el que las supercomputadoras, instaladas en los barcos, recibirían energía a partir del movimiento natural de los olas y se refrigerarían con el mismo agua.
Por si fuera poco, las naves marítimas al encontrarse a 11 kilómetros de la orilla, como mínimo, no tendrían que pagar los impuestos de propiedad de los ‘data-centres’, que están localizados por todo el mundo.
Para aclarar la idea, Google informó que los centros de ordenadores localizados en el barco o barcos “captarán la energía del movimiento del agua y la convertirán en electricidad y/o la bombearán para refrigerar los ordenadores y así, reducir el calentamiento”
Las supercomputadoras alojadas en los ‘data centres’, que pueden tener el tamaño de un campo de fútbol, usan enormes cantidades de electricidad para evitar el sobrecalentamiento de las máquinas.
En un intento de solucionar el problema, ya que no es muy ecológico, Microsoft ha investigado la construcción de un ‘data-centre’ en climas muy fríos como Siberia.
Mientras, en Japón la empresa tecnológica Sun Microsystems planea enviar sus supercomputadoras a una mina de carbón abandonada, usando el agua del suelo como refrigerante
Google no ha confirmado cuando tendrá lugar el desplazamiento de las supercomputadoras a los barcos, aunque la compañía ha afirmado que están archivando las ideas que surjan sobre la variedad de aplicaciones de la patente, “algunas de estas ideas se convertirán en productos reales, servicios o infraestructuras y otras no”.