Un estudio realizado por un equipo internacional de científicos liderado por investigadores de la Universidad Complutense de Madrid, en España, y publicado en “Translational Psychiatry”; sugiere que la ayahuasca fomenta la formación de nuevas neuronas. Los investigadores han comprobado con sus resultados en animales que uno de los componentes naturales de la ayahuasca -la dimetiltriptamina (DMT)- fomenta la formación de neuronas y es capaz además de inducir la formación de otras células cerebrales. En las enfermedades neurodegenerativas, la muerte de determinados tipos de neuronas ocasiona los síntomas de patologías como el alzheimer y el parkinson. Han recordado los investigadores, y han observado que el ser humano tiene la capacidad de generar nuevas células neuronales, pero depende de otros factores y no siempre es posible.
Los resultados de cuatro años de experimentación “in vitro” y “en vivo” en ratones, que han demostrado “una mayor capacidad cognitiva al ser tratados con esa sustancia”, esta capacidad para modular la plasticidad cerebral indica que tiene un gran potencial terapéutico para una amplia gama de trastornos psiquiátricos y neurológicos, entre los que se encuentran las enfermedades neurodegenerativas.
Esta investigación se une al trabajo realizado por la Fundación ICEERS quien realizó un estudio publicado originalmente en la revista Journal of Psychoactive Drugs, sobre consumidores habituales de ayahuasca en España con el objetivo de caracterizar el estado de salud de las personas que participan regularmente en ceremonias de ayahuasca en España y conocer los efectos sobre la salud pública. Las conclusiones del estudio apuntan a que el uso de ayahuasca en ceremonias es una práctica que se puede equiparar a otras prácticas de autocuidado, que no tiene efectos negativos sobre la salud pública ni sobre un amplio espectro de la salud de los participantes.
A la pregunta de “¿Cómo crees que te ha influido el consumo de ayahuasca?” un 67,5% de la muestra respondió que le había repercutido muy positivamente, un 30,7% que le había influido positivamente y un 1,7% dijo que no le había influido de ninguna manera. Ningún sujeto eligió las opciones negativas de respuesta. Más allá de la percepción subjetiva de los participantes, los cuestionarios revelaron que los usuarios de ayahuasca puntuaron igual o mejor que la población general en indicadores de salud general, estilo de vida, salud mental, adaptación al medio, gestión del estrés, apoyo social y valores.
La ayahuasca es el resultado de una mezcla entre dos plantas amazónicas: la enredadera de ayahuasca (Banisteriopsis caapi) y el arbusto chacruna (Psychotria viridis). En la ayahuasca, la “DMT” se une a un receptor cerebral y es ahí cuando se potencia su efecto alucinógeno. La ayahuasca -que en quechua significa ‘soga de los espíritus’- es una bebida tradicional indígena muy conocida en Sudamérica, utilizada históricamente por los chamanes como parte de la medicina tradicional de los pueblos amazónicos. Esta bebida puede ser encontrada en Bolivia, Brasil, Colombia, Ecuador, Perú y en algunos sectores de Venezuela.
Fuentes: forbes.co & iceers.org
