En plena tensión internacional por el bombardeo de Estados Unidos a la base aérea siria de Ash Sha’irat con 59 misiles Tomahawks las redes sociales se han hecho eco de una declaración oficial del inicio de la Tercera Guerra Mundial por parte de la ONU.
Sin embargo se trata de una “fake news” , un afán de sangre repugnante donde se merma la vida de seres inocentes en pos del entretenimiento vacío y morboso. Pero eso no parece importar, mientras a la gente le siga divirtiendo y siga siendo rentable no parece que acabe, ni siquiera las practicas que son completamente ilegales (como las peleas de perros) han cesado, sin mencionar que llegamos a tal punto de dañar directamente al planeta por mero entretenimiento o por indiferencia a las energías renovables. Quemar un cerro es violencia contra el ecosistema, talar arboles de manera desmedida, la contaminación de los ríos o mares, la caza, el desinterés por donde va tu basura. Todo eso se acumula en un aquelarre de destrucción de la mano del ser humano… que parece no importar… destruir con el mero echo de destruir…
La sed de sangre existe en todos nosotros, es algo genético pero existen practicas no dañinas para drenar, muchas personas utilizan los deportes y el ejercicio físico en general para drenar sus energías, otros emplean jugar vídeo juegos (de ahí que los juegos de batalla sean tan famosos) y otros optan por practicas mas alejadas de la violencia física, como la pintura, la lectura y la escultura para drenar tensiones. En general ninguna de esas practicas afecta negativamente a otros seres vivos.
Pero, en ultima instancia ¿que camino debemos tomar? un camino de conciencia, de estar al tanto que somos la especie mas inteligente y que mas cambios a generado en el planeta y que por ende tenemos una deuda con la tierra, nuestra madre, es cierto que el planeta no podrá acogernos para siempre, esta comprobado que su periodo útil para la vida es finita, sin mencionar que esta en la naturaleza del hombre explorar y quedarnos en la tierra seria contra intuitivo, pero al no haber otros mundos conocidos con la capacidad de albergarnos este es el único hogar que tenemos, no destruyas a tu hogar ni a los hermanos con los que lo compartes.
Así que aunque esta en nuestros génes, no usemos como excusa a nuestro cerebro reptil para justificar comportamientos de barbarie, no reneguemos de la ética humana, pues las cosas mas hermosas hechas por la mano del hombre han venido de esos momentos en el que nos paramos a pensar y ese fuerte sentimiento de compasión sale a flote, sentimiento que esperemos no desaparezca, si no por el contrario, aumente…
Es hora de que la empatía sea imperativa en nuestro día a día, pues solo así nos expandiremos, solo así llegaremos a nuestro destino, prolongar nuestra existencia y crecer por el cosmos.
Compasión para cada ser vivo sin importar su raza, genero, especie o creencia.
