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Sven Vath

Utilizar t?rminos como “emperador del trance”, “techno guru”, “chaman digital” o nombres por el estilo para referirse a un personaje como Sven V?th es pecar de reduccionismo. No son muchos los que verdaderamente pueden presumir, como ?l, de haber escuchado, divulgado, influenciado o interpretado tantos estilos diferentes. Sven V?th ha compuesto melod?as en las que el canto de las ballenas y el sonido de los teclados se fund?an en un abrazo m?stico, m?s propias de alguien como Kitaro que del principal representante del llamado sonido Frankfurt. O lo que es lo mismo: trance hipn?tico, tribal y minimalista para las pistas de baile. Su incansable odisea alrededor del mundo es responsable en buena parte de esa ecl?ctica concepci?n musical. As? las cosas, la fusi?n ha sido una constante en su vida. Todo ese tiempo, todas esas experiencias e influencias de las que habla se encuentran acumuladas en los fundamentos de su actual estadio de madurez personal y musical.

Hablar de su vida es para muchos hablar de la vida del techno tal y como lo conocemos hoy en d?a. Sus primeras juergas nocturnas transcurrieron en el Vogue y el Dorian Gray, dos de los clubes m?s influyentes de la ciudad de Frankfurt a principios de los ochenta. En ellos tuvo lugar su acercamiento a la labor detr?s de los platos y empez? a hacer gala de su reconocido narcisismo. Por aquel entonces se disfrazaba de forma suficientemente llamativa como para no pasar desapercibido ante la mirada de los dem?s. Sus gustos musicales estaban ligados a la movida new romantic, pero pronto empezaron a interesarle m?s los sonidos que llegaban desde los Estados Unidos y as? fue como conoci? el house.

Y es que si hay un rol que siempre se le ha atribuido es el de descubridor y difusor de nuevos estilos. Sven reflexiona al respecto: “Hoy en d?a todo es mucho m?s sencillo para m?. Hubo ?pocas en las que parec?a que deb?a batirme con alguien para defender un sonido. ?se no es mi papel, mi objetivo es hacer bailar a la gente, hacerles felices”. As? fue como, en 1984, empez? a pinchar house y techno. Mientras unos le defend?an diciendo que ?sa era la m?sica del futuro, otros le llamaban loco. Tres a?os m?s tarde se erig?a como pionero en realizar sesiones de Electronic Body Music. Al cabo de un a?o, y sin ning?n tipo de prejuicio, sus sets se llenaban de eso que hoy conocemos como acid house. Ya en 1990 invitaba a unos desconocidos a actuar en su club de Frankfurt. Su nombre, Prodigy.

Sven V?th tambi?n ha conocido el ?xito m?s comercial y ha descendido a los infiernos del desastre financiero. En 1986 las revistas juveniles le convirtieron en una estrella de los adolescentes alemanes como l?der de la Off y gracias al ?xito obtenido con el tema “Electrica Salsa”. En este proyecto estaban implicados, por un lado, Luca Azillotti y Michael M?nzing, y por el otro, Steve B Zet y Matthias Hoffman. Los primeros crearon en 1989 una de las formaciones m?s respetadas de la escena eurobeat: SNAP! Mientras, Sven formar?a junto a Steve y Matthias una factor?a de m?sica dance bautizada con el nombre de Mosaic que m?s tarde le llevar?a a crear uno de los sellos m?s influyentes del pa?s. En sus recuerdos de aquella ?poca cuenta haberlo pasado bien mientras dur?, pero siempre bajo excesivas presiones para conseguir temas de ?xito y aumentar las ventas de discos. “Hoy en d?a me encuentro mejor conmigo mismo: me miro al espejo y me veo tal como soy. Hago lo que estoy haciendo sin ning?n compromiso”.

As? mismo, cuando a principios de los 90 el techno se hac?a el amo de la escena underground mundial, all? estaba Sven. Su nombre era uno de los pocos que se encontraban en las agendas de contrataci?n para pinchar a trav?s de las fronteras. Sven V?th fue adem?s uno de los primeros DJs en prestar su cara en un mundo en el que reg?a el anonimato, convirti?ndose en uno de los primeros en aplicar el “star system” del rock’n’roll al mundo de la noche. Ambicioso, histri?nico y culo inquieto, entre el verano de 1991 y la primavera de 1992 V?th, cre? Eye Q -junto a Matthias Hoffmann y otro amigo suyo, Heinz Roth- poniendo la primera piedra de lo que m?s tarde se conocer?a como el sonido de Frankfurt, trance o como quieras llamarlo. Eye Q pose?a adem?s otros dos subsellos: Harthouse, dedicado al house y el techno, y Recycle Or Die, especializado en m?sica electr?nica experimental y ambient. Una empresa de la que han surgido nombres tales como Spicelab, Speedy J o Hardfloor. Ese mismo a?o fue tambi?n el de su encuentro con su, a partir de entonces, inseparable amigo Ralf Hildenbeutel. No es demasiado arriesgado afirmar que Sven V?th, tal y como lo conocemos a trav?s de su discograf?a, es el nombre tras el que se hallan ambos trabajando mano a mano.

Quienes presumen de conocer al dedillo la obra del m?sico alem?n aseguran que su producci?n de maxis supera las tres decenas. Sus ?lbumes son m?s f?ciles de contabilizar. Como Sven V?th, su primer trabajo recibi? un clamoroso aplauso por parte de la cr?tica. “Accident In Paradise” era una mezcla de m?sticas sinfon?as orientales, ritmos tribales capaces de arrebatarte el esp?ritu y sonidos procedentes de la naturaleza y el laboratorio. El ?lbum y su single, “L’Esperanza”, se convirtieron en el primer negocio redondo de Eye Q.

A finales de1993 Sven publicaba su segundo trabajo, “The Harlequin, The Robot And The Ballet-Dancer”: trance, house y ambientaciones en la l?nea personal de V?th, que en esta ocasi?n recibi? malas cr?ticas por parte de la prensa, especialmente de la brit?nica. Entonces declar?: “Aphex Twin y otros crean sonidos distorsionados y depresivos, y la prensa brit?nica parece preferirlos. Quiz? sea un reflejo de sus propios sentimientos. Yo tengo buenas vibraciones para compartir y me gusta hacerlo a trav?s de mi m?sica. Mi anterior ?lbum les gust?, el nuevo les parece todo lo contrario. Es la forma de ser de los ingleses”.

Y “Touch Themes of Harlequin, Robot, Ballet-Dancer” fue el pertinente ?lbum de remixes a cargo de lo mejor del momento: Underworld, Speedy J, David Holmes o Hardfloor, entre otros. “Decid? que quer?a poner todo ese material en manos de mis m?sicos y remixers favoritos, gente por la que siento un gran respeto. Pens? que quiz? tuvieran ideas que aportar. Estoy muy satisfecho”. Antes del fin del mismo 93 public? un nuevo ?lbum, pero esta vez bajo una de sus otras caras, Astral Pilot. El ?lbum se titul? “Electro Acupunture” y, seg?n ha explicado el mismo Sven V?th, la inspiraci?n le lleg? durante un viaje a Jap?n en el que se puso en manos de la acupuntura para solucionar unos problemas de espalda. De c?mo le fue el tratamiento no tenemos noticia, pero el ?lbum, compuesto a medias con el ex-miembro de Off, Stevie B Zet, muestra su visi?n m?s cruda del techno. “Cuando estoy en el estudio s?lo quiero hacer buena m?sica, no s?lo para un sector del p?blico, ravers o clubs kids. Tengo un amplio espectro musical y creo que mi m?sica puede divertir a todo el mundo”. Eso explica su promiscuidad estil?stica y sus infinitas identidades: Barbarella, Sam Vision, Metal Master… 1995 fue en la vida de Sven V?th un a?o de importantes cambios. Su primera relaci?n larga y estable con una mujer se vio complementada con un cambio de look y con un decreciente uso de sustancias t?xicas despu?s de a?os de desenfreno. En el terreno profesional, V?th sufre un importante tropiezo por culpa de un proyecto llamado Cocoon con el que invirti? y perdi? mucho dinero. Junto a Stevie B Zet compuso la banda sonora del thriller “The Cold Finger” y a principios de 1997 decidi? abandonar Eye Q y Harthouse. Sus ex socios decidieron trasladar el negocio a Berl?n, pero los problemas para cubrir las facturas les obligaron a cerrar. Hoy Eye Q s?lo funciona como discogr?fica en el Reino Unido y los derechos de Harthouse han sido vendidos a Undercover Music Group. Y Sven V?th, que hasta ahora hab?a diferenciado sus producciones destinadas a los clubs de las aptas para todos los p?blicos, ha acabado fusionando todos sus mundos en uno solo. Tal como ocurri? con su LP, “Fusion”, que no era ?nicamente una mezcla de estilos musicales, sino que pretend?a ser un retrato sociol?gico y un alegato contra el miedo al contacto y al contagio. Con ?l, abandon? esas ambientaciones cercanas a la new age para dar ?nfasis al popurr? de estilos que avanza el t?tulo.

En los ?ltimos a?os, adem?s de mantener vivo el m?tico club de Frankfurt del cual es propietario desde 1988, The Omen (el antiguo Vogue) ha continuado viajando con su maleta de discos por todo el mundo y all? donde va le preceden todo tipo de rumores sobre sus largas sesiones. “Yo me aburro cuando debo realizar un set de dos horas, pero nunca si es un set de doce. No se trata de pinchar un tema tras otro, sino de explicar una historia. Me gusta poner a la gente en trance, es decir, alcanzar un estado mental al que se puede llegar con muchos estilos musicales: percusiones afro, ethno beats o m?sica hind?. Intento crear algo espiritual y para ello necesito un largo periodo de tiempo. Mis sesiones son una combinaci?n de ambient punk, science fiction house, progressive voodoo techno y liquid monster trance”. En definitiva, un car?cter poli?drico que todav?a esconde m?s de un as en la manga. El ?ltimo, el mix-CD “Sven V?th In The Mix. The Sound Of The Second Season. Noche Y D?a”, donde conviven Funk D’ Void, Speedy J, Sensorama, Steve Bug y Aphex Twin.