Se suele ser recurrente con ciertas temáticas, personajes , hechos o circunstancias, luego de un año “recurro” y en víspera del “Día Internacional de Información sobre el peligro de las minas y de asistencia para las actividades relativas a las minas” cuyo lema central de la campaña invita a “remangarse” para recordar que a los miles de víctimas que dejan las temibles y criminales minas anti personal, y donde Colombia, en ésta oportunidad no solo “deshonrosamente” se destaca entre los países con más violencia citadina, drogas o corrupción, en ésta oportunidad, ocupa el vergonzoso y doloroso segundo lugar en el mundo (después de Afganistán) con más víctimas por las minas anti personales.
Hay que recordar que las víctimas, no son solamente nuestros hermanos colombianos que visten un uniforme del ejército Nacional, el funesto listado incluye: niñas, niños, mujeres y hombres “civiles” que en forma absurda y despiadada son involucrados y afectados en un conflicto estéril, fruto de la soberbia e irracionalidad de las partes.
La cifra de 9.704 VÍCTIMAS, por minas anti personal, en el periodo: 1999 a Feb./2012 en Colombia, más que elocuente y dolorosa, debe hacernos reaccionar y manifestar un rechazo absoluto, vehemente y constante contra “La siembra” de los temidos artefactos que acaban con la vida de miles de colombianos, y que dejan mutilados a otros tantos.
Los departamentos más afectados en el periodo anteriormente mencionado son: Antioquia con 2178 víctimas, Meta 964, Caquetà 747 , Norte Santander 688 , Bolivar 598, y en ese “terrorífico orden descendente” otros departamentos (Ver en detalle “Mapa de la Infamia y el Terror” adjunto a la nota).
(Fuente: Acción Contra Minas, Vicepresidencia de la República.)
Dolorosamente esas víctimas no son “falsos positivos” como es costumbre en ésta tierra de todos y de nadie, esa víctimas son reales, a quienes en un solo paso les cambió la vida radical y violentamente.
Importante entonces , en la antesala a la semana Santa, recordar y solidar izarse con éstas víctimas, no solo cada año cuando los medios nos recuerdan con una campaña la realidad del conflicto, la solidaridad hacia ellos y el rechazo ante el uso de las minas, por parte de los violentos e irracionales, debe ser permanente.
Que llegue el día en que la única preocupación de quienes transitan por nuestros campos , selvas y zonas rurales sea únicamente por no pisar las flores y especies de nuestra rica y hermosa flora y fauna , que por fin quede atrás esa “real y terrorífica realidad” de las minas…
