Al menos 180 personas murieron y unas 200 quedaron heridas en la madrugada de hoy, en un incendio ocurrido en una discoteca en la ciudad de Santa María, en el estado de Río Grande do Sul, en Brasil, según confirmó la policía de dicho país.
De acuerdo con el comandante del Batallón de Operaciones Especiales de la Policía Militarizada del estado de Río Grande do Sul, mayor Cléberson Bastianello, hasta ahora han sido trasladados 180 cuerpos al Centro Deportivo Municipal, en donde se realizarán las tareas de identificación.
“En este momento tenemos aquí 180 cuerpos, pero infelizmente ese número va a aumentar. Algunas personas fueron llevadas a los hospitales ya muertas”, afirmó el oficial.
Además de los centros médicos de Santa María -ciudad ubicada a 286 kilómetros de Porto Alegre, la capital regional- los heridos han sido trasladados a hospitales de municipios vecinos.
“Hemos movilizado todo el estado. Pusimos a disposición hospitales de diversas ciudades, incluyendo Canoas, Santo Angelo y Santa Cruz. Todos están colaborando para ofrecer la mejor atención posible”, afirmó el secretario de Salud de Río Grande do Sul, Ciro Simoni.
El siniestro, cuyas causas aún se desconocen, comenzó poco después de las dos de la madrugada en el local nocturno Kiss, sin embargo, Bomberos recién pudo controlarlo tres horas después.
Todo habría comenzado cuando el vocalista de la banda que se presentaba usó una bengala para ofrecer un espectáculo pirotécnico y las chispas alcanzaron la espuma que se usaba como aislante acústico en el techo del establecimiento.
Las llamas provocaron pánico entre las más de mil personas que estaban en la discoteca, quienes corrieron para tratar de escapar y donde algunas murieron pisoteadas. Asimismo, la dificultad en la evacuación causó varias muertes por asfixia.
Según el delegado de la Tercera Comisaría de Policía Civil en Santa María, Sandro Meinerz, la mayoría de los presentes murieron por inhalación de humo, al no conseguir salir a tiempo del lugar.
Las autoridades no descartan que haya más muertos, en tanto, Tarso Genro, gobernador de Río Grande do Sul, viajó al lugar del accidente para supervisar las labores de rescate y remoción de escombros, señalando que “viajo al lugar para compartir el luto de todas las personas y de todo el país”.
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