Desde hace más de 150 años, el campo magnético de la Tierra —nuestro escudo invisible contra la radiación solar y cósmica— se está debilitando rápidamente. Pero lo que debería ser noticia global se mantiene enterrado entre papers técnicos, declaraciones vagas y silencios incómodos.
¿Qué significa esto?
Que podríamos estar en los últimos 100 a 200 años de esta transición magnética.Algunos modelos sugieren que la inversión total (si ocurre) tomaría entre 300 y 1.000 años desde su inicio, pero eso no significa que debamos esperar siglos para notar los efectos. Ya están aquí.
Las excursiones pasadas (como la de Laschamp hace 42.000 años) ocurrieron en apenas centurias, no milenios. Y su impacto fue tan fuerte que dejó huellas genéticas, climáticas y culturales profundas.
📉 El Polo Norte Magnético ya no está donde solía. Se está moviendo a una velocidad inusual, alejándose de Canadá hacia Siberia.
🌐 Una zona del planeta, conocida como la Anomalía del Atlántico Sur, se ha convertido en un agujero magnético donde los satélites colapsan.
⚠️ Desde 1850, la fuerza del campo magnético ha caído un 15%, y sigue bajando.
¿Estamos ante una Excursión Geomagnética?
Un fenómeno natural en el que los polos magnéticos se desorganizan, el escudo se debilita y entra más energía al planeta. Ha pasado antes. Siempre coincidió con cambios climáticos abruptos, alteraciones en la vida terrestre… y en la conciencia humana.
¿Y los científicos?
Ellos mismos publican los datos, pero lo presentan como algo sin mayor relevancia.
¿Por qué? Porque una humanidad consciente de lo que viene no se deja controlar tan fácilmente.
El campo magnético se genera por el movimiento del hierro líquido en el núcleo externo de la Tierra. Cuando estas corrientes se desorganizan, el campo se debilita y puede invertirse o desviarse.
El núcleo terrestre no es una máquina estable: vibra, se frena, se acelera. En 2023, se detectó incluso que giró más lento que la corteza, lo cual nunca se había visto tan claro.
La energía térmica y dinámica que sube desde el núcleo está cambiando, generando zonas de flujo anómalo en el hemisferio sur. Esto desestabiliza el campo global.
Las tormentas solares, los cambios en la heliosfera y las nubes de polvo interestelar que atraviesa el sistema solar afectan el equilibrio magnético de los planetas. La Tierra está siendo más expuesta a energía cósmica por la debilidad de su escudo.
Algunos investigadores alternativos vinculan esto a ciclos galácticos de ~12.000 años que producen resets electromagnéticos en todos los cuerpos celestes internos.
Desde una lectura más vibral: el campo magnético de la Tierra no es sólo geofísico, también es bioenergético y psíquico.
Cuando hay disonancia colectiva (guerras, colapsos, desarraigo espiritual), el campo terrestre también fluctúa.
Humanidad y Tierra están entrelazadas como un sistema abierto.
Preparados? no parece… te recomendamos este documental: