Los consumidores de marihuana del mundo se regocijaron cuando dos estados en Estados Unidos finalmente lograron lo que antes era imposible: legalizar la marihuana para uso recreativo. La industria finalmente llegaría a los escaparates.
Pero los emprendedores que esperan establecer tiendas o cultivos en Colorado o Washington, Estados Unidos, deben tener cuidado. Los fiscales federales aún ven a la marihuana como ilegal, y no muestran signos de dar marcha atrás a las redadas que practican. Además, cada ciudad y condado de Colorado puede crear sus propias leyes.
Dave Schwaab tenía una empresa de tecnología y estaba casi jubilado cuando decidió meterse al negocio de la marihuana en 2009. Fue casi una década después de que Colorado legalizó la marihuana médica para pacientes con ciertas condiciones de salud debilitantes.
Abrió su dispensario, Abundant Healing, en Fort Collins, Colorado, Estados Unidos. Empleó a 19 personas, cultivó 1.200 plantas y proveyó a 1.000 pacientes. Sus ingresos superaron los 70.000 dólares mensuales.
En 2011 la ciudad aprobó una nueva disposición que prohibía dispensarios. La policía llegó y cortó las plantas. Schwaab fue forzado a despedir a todo su personal y perdió 300.000 dólares. “Me adherí a cada regulación legal estatal, a todas las 165 páginas de requisitos inequívocos”, dijo.
Schwaab recurrió a cultivar marihuana por su propia cuenta y proporcionarla a 10 pacientes, uno de los cuales tenía cuatro cánceres distintos. Otro sufría de neuropatía, un trastorno nervioso que causa dolor súbito y sensación de ardor.
La Enmienda 64 de Colorado, aprobada en la elección de este martes, le ofrece una oportunidad de regresar al negocio y venderla a cualquiera que tenga 21 años o más. Suena como una propuesta prometedora, pero Schwaab tiene ciertas dudas.
“Aunque esta enmienda maravillosa fue aprobada, puede que no regrese al negocio por esta pesadilla legal”, dijo. “Se llevaron mi capital una vez. No voy a dejar que vuelvan a hacerlo”.
Quienes aspiran a abrir un negocio de marihuana en Colorado o Washington también estarán en problemas si pretenden obtener un financiamiento. Los bancos importantes evitan hacer negocios con la industria de la marihuana, porque temen que las agencias federales los acusen de crimen organizado relacionado con drogas y lavado de dinero.
Joshua Kappel, un abogado de Denver, Estados Unidos, quien asesora a la industria de la marihuana, dijo que los recién llegados tomarán “un enfoque muy cuidadoso”. En Colorado, el estado tiene un año para desarrollar la regulación, dijo la directora de promoción de la Enmienda 64, Betty Aldworth.
Además el mercado en general tendrá que soportar los elevados impuestos. Un impuesto total del 25% será impuesta al producto en tres etapas: cuando el productor lo vende al procesador, cuando el procesador lo vende al vendedor minorista y cuando este último lo vende al cliente.
El difícil camino por delante no impidió que las acciones de marihuana aumentaran este miércoles. Las acciones de Medical Marijuana, Growlife y Hemp, empresas comercializadoras de marihuana que cotizan en mercados extrabursátiles (mercados cambiarios no oficiales que no tienen una ubicación física).