En vista de la cancelación de eventos culturales y la notable disminución de visitantes debido al virus de la corona, la ministra de Cultura, Monika Grütters, ha respaldado a las instituciones culturales y artistas:
“Soy consciente de que esta situación supone una gran carga para las industrias culturales y creativas, y en particular para las instituciones más pequeñas e independientes. Puede poner a los artistas en una angustia considerable ”, dijo Grütters.
El Comisionado del Gobierno Federal para la Cultura y los Medios de Comunicación recomienda que las instituciones culturales financiadas por el gobierno federal utilicen la información provista por el Instituto Robert Koch. Después de eso, los eventos más grandes deben cancelarse, especialmente aquellos que tienen lugar en espacios limitados. Con eventos más pequeños, uno tiene que preguntarse con respecto a las circunstancias del caso individual, si la implementación es responsable.
“En esta situación, sin embargo, también reconocemos que la cultura no es un lujo con el que uno se trata en los buenos tiempos, pero ahora estamos viendo cuánto nos falta si tenemos que prescindir de ella por un tiempo determinado”, dijo Grütters. “Si aún recomendamos cancelar eventos en esta situación, lo haremos porque actualmente estamos lidiando con una situación de emergencia excepcional”.
Grütters continúa: “Los artistas y las instituciones culturales pueden confiar en él, especialmente teniendo en cuenta las situaciones de vida y las condiciones de producción de las industrias culturales, creativas y de medios: ¡no los defraudaré! Tenemos en cuenta sus preocupaciones y trabajaremos para garantizar que se incluyan los intereses especiales del sector cultural y el sector creativo cuando se trata de medidas de apoyo y apoyo de liquidez ”. Por esta razón, el Gobierno Federal ha alentado a los representantes a discutir las próximas medidas de ayuda Invite a representantes de la cultura y los medios de comunicación. “Tenemos que reaccionar a las dificultades y emergencias sin culpa nuestra y compensarlas. No solo debe valernos la economía, sino también nuestro paisaje cultural, que ha sido muy afectado por las cancelaciones ”, dijo Grütters.
